Al llegar a Montreal empezamos a tener contacto con diversas culturas. Esto nos ha enriquecido enormemente, y al igual que hemos tratado con rumanos, rusos, ucranianos y de otros países de europa del este, también hemos tenido mucho contacto con nuestros hermanos sudamericanos, llámense, argentinos, bolivianos, peruanos, chilenos, colombianos, ecuatorianos, venezolanos, uruguayos, etc...
Una cosa que me ha llamado mucho la atención son las particularidades del lenguaje español que es hablado en los distintos países de América, y como una palabra en México puede significar totalmente otra cosa en Argentina o en Perú.
En el caso del Español Mexicano hay muchas palabras que no son usadas en otros países o que tienen otra connotación, tales como:
- ¿Mande?: Proviene del verbo mandar. Algunos dicen que son resabios de la manera como los indígenas se dirigían a sus patrones con la frase típica del indio mexicano "mande usted (o aste) patroncito", y que por lo tanto deberíamos dejar de usar por las connotaciones de inferioridad y sumisión implícitas. Sin embargo, en la realidad es usada “-Hijo...” —“mande mamá”. Sin embargo, su utilización se da como una manera de respeto a los mayores o a las personas con algún tipo de autoridad superior, como los padres, el profesor, etc... Para los jefes en el trabajo cada vez mas usamos el "DIGA".
- Ahorita: Es el vocablo mexicano con mayor dificultad de comprensión ya que indica tanto una acción en un lapso de tiempo indefinido “¿Puedes ir por las tortillas?...” — “Ahorita voy” como el instante preciso en que se habla “¿Cuándo es el partido?...” — “¡Ahorita!”. En esta tónica podemos también hablar de "Al ratito" que viene de "Al rato voy/vengo". La peculiaridad cultural de como medimos el tiempo en México puede ser muy frustrante para quienes vienen de culturas donde la precisión es muy importante.
Por otro lado, el uso de diminutivos es bastante extendido en todo el territorio mexicano: Por ejemplo: poquito, chiquito, taquito, tacita, cervecita, chilito, carrito, y así pueden continuar con muchos nombres, adjetivos y adverbios.
- Platicar: Conversar (Verbo usado también en América Central). "Vamos a echar una platicada": vamos a conversar
- Dar pena: Dar vergüenza. "Me da pena ajena", una expresión que significa que algo te da pena pero es tan grande que le agregas la de los demás (la ajena).
- Chavo(a), plebe (en el norte), escuincle(a) (en el sur): Muchacho, Muchacha.
- Tlapalería: Especie de ferretería con artículos para construcción mayoritariamente.
- Apapachar: Consentir, dar abrazos. "Quiero que me apapaches": que vengas y me abraces o que hagas algo para consentirme.
- Coger: en su significado original, tomar, prender, agarrar, asir, apresar. En México se utiliza mucho con el sentido de fornicar, realizar el acto sexual, utilizado de una manera peyorativa.
- Chingar: Palabra del caló, que en su orígen significa fornicar, la cual puede tener diversos significados según el contexto en que se utilice.
Ejemplos:
"¡Ah que bien chingas / como chingas!": es un insulto para decir que alguien molesta mucho,
"¡Qué chingón eres!": Eres una persona muy lista.
"Me llevé una chinga en el trabajo": Estuve muy atareado en el trabajo.
"Me chingué a Cristina": Tuve relaciones sexuales con Cristina (despectivo). Aunque si cambiamos el contexto puede significar tambien fraude, engaño, como en “Me chingue /a ese wey /la lana (dinero) /al fisco (evasión fiscal).
"José tiene un chingo de dinero": José tiene muchísimo dinero.
"¿Viste esos zapatos? Están chingones": ¿Has visto esos zapatos? Son muy buenos / tienen clase / son muy atractivos.
"Unos pandilleros le pusieron una chinga a Raúl": Unos pandilleros dieron una golpiza tremenda a Raúl.
Caso aparte es el epítome del insulto mexicano, la frase "Chinga tu madre" que tiene matices culturales muy profundos.
- Naco: Vulgar y de muy mal gusto.
- Fresa: Esnob, se dice también de la persona que proviene de buena posición social, también llamada "hijo(a) de papi".
- Güey: (alt. wey - guey - güé): Genérico para sustituir el nombre del alguien del que se tiene mucha confianza –
- "Me dijo ese güey": usado para designar una persona anónima
- "¿Quién te dijo eso? Un güey que pasó por la calle” usado para denostar la inteligencia de alguien
- "¿Cómo puedes decir eso? Estás bien güey [sic]", usado como muletilla sin significado definido
- "No lo puedo creer, me siento muy deprimido, güey".
- Cabe destacar que se usa mucho más en el norte que en el centro y lo usan más los "fresitas" que otras clases sociales. Sin embargo, a causa de un cómico mexicano (Adal Ramones) su uso se ha extendido enormemente en los últimos años, "oye wey, sabias wey, que aquel wey, no manches wey, se chingo a fulanita, wey??".
- Pinche: Adj. despectivo: "pinche carro", "pinche día", "pinche wey".
Algunas Expresiones:
- ¡Qué padre!, ¡Qué suave! : que bien.
- Esta de poca madre!, esta de pelos!, esta chingón!, esta chido (chilo)!: esta muy bien, excelente.
- No manches!, No mames!, No chingues!: No molestes, o expresión de incredulidad.
- Que pex?, Que pedo?!, Que jais?: significan ¿qué pasa?.
- Simón: expresión usada en el norte para decir SI, otro ejemplo: "si montaras en corcel", aunque ya ha entrado en desuso por la longitud.
Nota: hay muchas expresiones donde las palabras son cambiadas por otras que no tienen nada que ver con el significado de las palabras que sustituyen, pero que guardan una entonación fonética con la expresión o simplemente se guarda la primera letra de la palabra, aunque esto se ve de mal gusto y no es aceptado como un buen uso del lenguaje.
Regionalismos:
Junto al conjunto de rasgos comunes a todas las variantes del español mexicano, existen diferencias de vocabulario, entonación y gramática características de cada región.
Por ejemplo, "bollo" en la Ciudad de México es un tipo de pan, pero en Yucatán son heces; en Chiapas "mecos" son personas rubias, mientras que lo mismo en la Ciudad de México hace referencia poco educada al esperma, también hace alusión al fluido nasal o "mocos", en Morelos refiere a las cosas o personas sucias (con mugre); a su vez esta expresión en Chihuahua hace alusión a personas poco inteligentes. "¡Cómo eres meco!", ¡Cómo eres tonto!.
Es muy curioso como podemos distinguir con relativa facilidad de donde viene la persona, por ejemplo, es fácilmente distinguible quien es del Norte (yy ñor [si señor]), de quien es del Sur (oye hijooo!!!). Luego podemos distinguir las distintas regiones: la costera, del bajío, la del DF (chilango), y las subregionales: yucateco (bomba!), veracruzano (mare!), acapulqueño (mi hermano!), etc...
Indigenismos
Dentro del español mexicano se usan palabras de orígen náhuatl y de otras lenguas. Sin embargo, los nahuatlismos son mucho más abundantes. Ejemplos:
- Nahuatlismos muy frecuentes: aguacate, cacahuate, cacao, coyote, cuate, chapulín, chicle, chino (por rizado), chocolate, ejote, elote, guachinango, guajolote, huarache, hule, jitomate, mayate, mecate, milpa, olote, papalote, petaca (por maleta), piocha, zopilote.
- Nahuatlismos medianamente frecuentes: ajolote, chichi (por pecho femenino), jacal, socoyóte (benjamín), tecolote, tianguis, tlapalería, zacate.
- Otros indigenismos: butaca, cacique, caimán, canoa, colibrí, chirimoya, naguas, guayaba, huracán, iguana, jaguar, jaiba, jején, loro, maguey, maíz, mamey, maní, papaya, piragua, tabaco, tapioca, yuca.
Extranjerismos:
Palabras como: Cantón (francés antiguo) que quiere decir casa, usado principalmente por las personas con menor educación; chifonier (del francés) que es la cómoda para la ropa; buró (del francés); carro: del ingles Car, que significa automóvil; troque: del ingles truck, camión de carga; entre muchos otros.
Conjugaciones:
En algunos casos no se diptongan algunos verbos que sí lo requieren:
- Dile que no "force" la herradura, en lugar de "Dile que no fuerce la herradura".
- Él "solda" los metales, en lugar de "Él suelda los metales".
- Deja que el arroz se coza, en lugar de "Deja que el arroz se cueza".
De manera no normalizada, algunos verbos terminados en -iar presentan ruptura de diptongo en su conjugación en el presente del indicativo:
- El banco negocía un préstamo, en lugar de "El banco negocia un préstamo".
- Yo no diferencío entre los colores, en lugar de "Yo no diferencio entre los colores".
- Yo te financío la obra, en lugar de "Yo te financio la obra".
En fin, esto es tan amplio que nunca terminaríamos, pero creo que nos damos una idea de la diversidad idiomática o lingüística que tenemos. Y bueno, esto lo hice debido a los reclamos populares.
Si tienen algunas otras dudas o aclaraciones, las podemos resolver en los comentarios.
Por último, les recomiendo esta liga: Academa Mexicana de la Lengua, parece que viene muy completa.